Skip to main content

FUNDAMENTAL VIGILAR LOS NIVELES DE COLESTEROL: IMSS

Menores con antecedentes familiares, requieren mayor atención.
Importante disminuir el consumo de grasas, azúcares y harinas.
Evitar el sedentarismo y fomentar la actividad física, clave para la salud.

Ensenada, Baja California.-Una dieta con exceso de grasas saturadas, la inactividad y obesidad a edades tempranas, son factores que aumentan el riesgo de padecer hipercolesterolemia -alto índice de colesterol en la sangre- en los menores.

Adriana Guillén Chávez, pedíatra del hospital de Gineco obstetricia (HGO) número 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tijuana, explicó que este padecimiento normalmente provoca la obstrucción de las arterias y causa infartos al miocardio o cerebrales; que aun cuando no son comunes durante la infancia, sí pueden registrarse al inicio de la vida adulta, sobre todo si se tienen antecedentes familiares de enfermedades cardíacas o de colesterol alto.

La principal causa, agregó, tiene que ver con la dieta, sobre todo con el consumo excesivo de carne, queso, leche, mantequilla, aceite de palma y coco; margarina, alimentos fritos o precocinados; galletas y repostería.

La recomendación del especialista es someterse a estudios para conocer los niveles de colesterol en la sangre de niños con antecedentes familiares de hipercolesterolemia o cardiovasculares; hipotiroidismo, obesidad, hipertensión o diabetes. Las posibilidades de que un menor de edad sufra este padecimiento se incrementan cuando sus padres o abuelos tuvieron problemas cardiovasculares antes de los 55 años en varones y antes de los 65 en mujeres; o cuando tiene niveles de colesterol superiores a los 240 miligramos por decilitro.

En caso de que los resultados de los análisis den positivo, explicó la doctora Guillén, se aconseja realizar cambios en la alimentación y aumentar la actividad física. Para mantener el colesterol bajo de la familia, es necesario consumir diariamente frutas, verduras, legumbres y cereales, preferiblemente integrales. También se debe disminuir la ingesta de carne rica en grasa, sustituyéndola por carne magra, preferiblemente de aves, evitando vísceras como hígado, corazón, riñones y sesos.

Además, incrementar el consumo de pescado blanco y azul, como sardina, trucha, atún y salmón. Elegir lácteos y derivados con bajo contenido en grasa; cocinar con aceite de oliva, evitando otras gasas como mantequilla y margarina; cocinar los alimentos al horno, vapor, a la plancha o en las brasas.

La especialista del IMSS en Tijuana indicó que resulta indispensable disminuir el consumo de bebidas azucaradas y el aporte de sal; realizar actividades físicas de forma regular y combatir el tiempo dedicado a actividades sedentarias para mantener un peso saludable.